10 alimentos humanos que son dañinos para los gatos
¡Tener gatos como mascota significa que te encontrarás en una montaña rusa de emociones, sentimientos y mucho más! Cuando tu compañero felino te mira con sus ojos conmovedores, ¡no hay persona cuyo corazón no se derrita! También se aplica a la hora de alimentar a tu gato.
Usted, siendo un amante de las mascotas altamente consciente, siempre buscará una dieta altamente balanceada y nutritiva, pero su gato siempre tendrá sus ojos en lo que está comiendo. Pero, antes de ceder, es importante que sepas qué alimentos no son beneficiosos para tu gato. Aquí hay una lista de 10 alimentos humanos que son dañinos para los gatos.
1. Cebollas
Evite los alimentos que contengan cebollas cuando alimente a su adorable gato, ya que no es adecuado para la salud de su compañero. Las cebollas contienen disulfuros y sulóxidos que son responsables de la destrucción de los glóbulos rojos, lo que provoca problemas médicos graves como la anemia. En muchos alimentos, la cebolla en polvo se agrega discretamente y puede resultar dañina. La cebolla en polvo también se encuentra en muchas comidas empaquetadas y alimentos para bebés. Por lo tanto, cuando compre Comida para gato, tenga mucho cuidado y verifique los ingredientes de la comida.

2. Pasas
Todos somos conscientes del hecho de que las pasas son un bocadillo saludable y muy delicioso, pero es un hecho que estas pasas son bastante beneficiosas para los seres humanos pero bastante venenosas para tu amigo felino.
Si los gatos se alimentan con pasas, pueden llegar a sufrir problemas repentinos de insuficiencia renal. Por lo tanto, no debes alimentar a tus gatos con uvas o pasas y si las comen accidentalmente, debes seguir revisándolos regularmente para ver si hay signos de toxicidad. Estos signos pueden ser falta de apetito, diarrea, debilidad, letargo, disminución de la micción y dolor abdominal.
3. Ajo
El ajo también es muy dañino para los gatos y al pertenecer a la familia de las cebollas, el mismo peligro se asocia con el ajo, aunque de forma más pronunciada, ya que las toxinas están más concentradas en el ajo.
4. Huevos crudos
Mucho hemos oído hablar de las ventajas de consumir huevos crudos. Aunque puede ser beneficioso para nosotros, puede resultar perjudicial para nuestros adorables gatos. Esto se debe al alto riesgo de E Coli o Salmonella en los huevos crudos que pueden resultar bastante peligrosos para su salud. Además, la avidina está contenida en las claras de huevo que dificultan la absorción de la vitamina B.
5. Alcohol
Aunque es posible que no le dé alcohol a su gato a sabiendas, pero si sorbe un poco cuando su bebida está desatendida, puede provocar intoxicación e intoxicación por alcohol.
6. Cafeína
Bebidas como el café y cualquier otra bebida que contenga cafeína pueden resultar perjudiciales para tu compañero felino. Puede causar deshidratación severa en ellos, ya que la cafeína tiene efectos diuréticos. También resulta en la estimulación del sistema nervioso y el corazón.

7. chocolate
El chocolate también es muy peligroso para tu gato, puesto que contiene teobromina. Básicamente, se trata de una sustancia química que puede tener muchos efectos nocivos para la salud de su gato.
8. Recortes de grasa
Si bien alimentar a su gato con un poco de grasa de vez en cuando es bueno, su exceso puede ser responsable de muchos impactos negativos en su salud, como la diarrea. El gato también puede sufrir otros problemas estomacales y vómitos, especialmente si alimentas a tu gato con grasa cruda.
9. Huesos
No debe alimentar a su gato con huesos, ya que pueden fragmentarse durante la cocción y provocar obstrucciones intestinales o laceraciones internas. Si les das huesos crudos, puede resultar un peligro de asfixia para tu adorable gato.
10. Nata o Leche
A medida que tus amigos felinos crecen, se vuelven cada vez más intolerantes a la lactosa. Sus cuerpos no pueden descomponer la lactosa y esto puede resultar en diarrea incontrolable. Si el gato se enferma demasiado, también puede sufrir deshidratación que puede complicar la situación de salud. Por ello, a los gatos no se les debe dar leche ni nata ni buscar opciones sin lactosa.